Esta corbata es ganadora porque tiene un inusual tono de rosa. Los matices de melocotón le dan riqueza y profundidad. El brillo de la seda satinada la hace aún más lujosa, tanto visual como táctilmente. Este accesorio puede ser usado tan fácilmente por un joven confiado y estridente como por un caballero maduro, seguro de sí mismo y exitoso.