Del punk a grunge a hipster, el tartán ha sido favorecido en círculos no convencionales de la moda por décadas, dandole al tartán una reputación unilateral de ser terminantemente casual. La corbata Hostlig combina sutilmente a rayas verdes y beige, y por lo tanto es perfectamente viable para un look más formal. Una ligera raya roja le rinde homenaje a su inherente rebeldía.