Cuando vaya al club de yates, desafíe la tendencia e inyectele algo de emoción a su cuello con las danzantes flores de Festoso. Aquellos que no tienen el coraje de desafiar las reglas, aunque sea levemente, ocultarán su envidia bajo miradas de desaprobación. Puede entrar seguro por la puerta del club, y aquellos que saben de moda le sonreirán a sabiendas.