La seda estampada italiana es deliciosa a la vista porque su brillo es más sutil que el de la seda pura. ¡Es aún más maravilloso al tacto! Acaricie esta tela y deléitese con su ligera rugosidad, que la hace instantáneamente más masculina y táctil. Los pequeños medallones en azul y blanco se ven espléndidos al contrastar con el amarillo dorado. ¡Una pajarita encantadora!